Esteban Cortés Rojas

=No da pie con bola; está más salado que un cuajo =¡Pide ahorrar a los mexicanos! =La pandemia arrasó con la economía =Gatell y sus números =¿A estas horas un súper delegado en salud?

 

El presidente López, creo, es bien intencionado pero no tiene idea de qué y cómo hacer para que el país marche bien. De la acción de un gobernante depende todo, siempre que sus disposiciones tengan una dosis, aunque sea pequeña, de sentido común. Pero a López nada le sale bien, no da pie con bola, tropieza con la misma piedra. Está más salado que un cuajo. Da pena verlo decir y hacer puras cosas que parecen ideadas por alguien que jamás ha estado en un cargo público.

Ya no es tiempo de hablar de que la economía se le cayó a bajo de cero de crecimiento desde antes del coronavirus, ni de que canceló obras que hubieran dado empleo y prestigio al país entre los inversionistas;  ni es tiempo de citar las obras tontas que inició (tren maya, refinería Dos Bocas, aeropuerto Santa Lucía), mucho menos de otras muy dañinas como la cancelación del Seguro Médico Popular para sustituirlo por un bodrio llamada Insabi o la compra de estadios de béisbol para satisfacer su ego de beisbolista frustrado. Si enlistáramos lo que ha destruido López, no acabaríamos pronto.

Para colmo, a López le cayó el coronavirus que, aparte de miles de contagios y muertes, trajo la depreciación del peso frente dólar, desempleo y, lo que peor, cierre de empresas que ya no podrán reabrir porque cuando pase la pandemia no tendrán capital.

El sector empresarial ha hecho tres propuestas a López para capotear el temporal y a las tres les ha hecho el feo pretextando que la rectoría económica corresponde al Estado. Aunque no lo dice, todos entendemos que el Estado es él como Luis XIV. Y él dice que no. Lo pinta de cuerpo entero su respuesta cuando le informaron que habían conseguido crédito del BID por 12 mil millones de dólares para apoyar a pequeñas y medianas empresas: “No me gustó el modito” de que se pongan de acuerdo para imponernos planes que luego tenga que avalar hacienda. Luego se supo que no se requería el aval de Hacienda; es decir, López no sabe ni lo que dice.

Y la última: López pidió a los mexicanos que, por lo que viene, ahorren “lo mucho o poco” que tengan, lo que en buen castellano quiere decir que no se ha enterado de lo que significa la pandemia que ha paralizado la economía y no permite pagar alimentos, agua, electricidad, transporte, predial y todos los impuestos fiscales. Es como pedirle a López que ahorre justo hora que se le secó la fuente de ingresos del petróleo, pues Pemex acaba de anunciar que abandona su meta de producción del año 2020 debido a la baja mundial del precio del crudo.

Y para coronar lo que llevamos de gestión de López, está la “lucha contra la corrupción”. Miles de obras han sido asignadas sin licitación, ilegalmente. Y de ese cacareo, Manuel Barttlet es monumento viviente. Unos apuestan a que Barttlet acabará en el bote (optimismo, pese a los pesares), otros a que, con todo y denuncias, Barttlet saldrá airoso. Si usted quiere apostar, le damos un tip: en este sexenio no hay corrupción, en todos los casos que se le señalan a López la respuesta es que “eso calienta”, que ya no es como antes, que eso es cosa de neoliberales, conservadores y adversarios de su gobierno. Es decir, no acepta ningún caso de corrupción en su gobierno porque sería como aceptar que es corrupto.

López es incapaz, inepto y mentiroso. No puede gobernar. Es mejor que se vaya.

MESON.- El 5 de mayo -estamos a once-, López Gatell declaró ufano que se “aplanó” la curva del coronavirus. Se refería a que la estadística de casos había dejado de subir y que en adelante todo sería como sentarse en la Piedra Lisa: suave descenso. Pero ese día 5 se presentaron 24,905 casos confirmados y 2,271 muertos. Al sábado 9 de mayo (fecha en que se inscribe esta columna) se contabilizan 33 mil 460 casos confirmados y 3 mil 353 muertos. La curva sigue como cuete en novenario: del 5 al 9 aumentamos en 8 mil 555 casos confirmados mientras los muertos aumentaron en mil 82. Gatell nomás repite mentiras que le ordenan <> Que el gobierno federal va a designar a un “súper delegado de salud” para que se encargue del tema coronavirus. Fíjese que oportuno el nombramiento, cuando el gobierno estatal ha actuado muy bien y controlado mejor que cualquier estado la pandemia <> ¿Sabía que los estados gobernados por Morena son los que tienen más casos de Coronavirus?… ¡Arrieros somos!