Luego de la controversia pública sobre el presunto plagio de la iniciativa de Ley de Educación del Estado de Morelos, por parte de la diputada del Partido del Trabajo, Ana Karen Hernández quien presentó en tribuna en el Congreso Local, así como las declaraciones de actores políticos, entre ellos el coordinador legislativo del PT, Carlos Farías al solicitarle  a su compañera de fracción  una disculpa púbica.

Este miércoles, la diputada  Ana Karen Hernández, diputada del Partido del Trabajo (PT), presentó a los medios de comunicación su posicionamiento al respecto, argumentando que de las acusaciones que la señala por haber plagiado la iniciativa de Ley de Educación del Estado de Morelos y la presentarla como propia el pasado 24 de junio, señalando que la crítica en su contra es “falsa, tendenciosa y mal intencionada”.

A continuación se publica el escrito de la legisladora:

01 de julio de 2020

A la Opinión Pública:

De manera responsable y en ejercicio del derecho consagrado en la Constitución Local, propuse una iniciativa para expedir una nueva Ley de Educación del Estado de Colima.

En un par de medios informativos y de acuerdo a declaraciones de la compañera diputada Rosalva Farías, de Nueva Alianza, se me ha acusado de haber plagiado la Ley de Educación del Estado de Morelos.  A esa crítica falsa, tendenciosa y mal intencionada,  se ha sumado el diputado Carlos César Farías Ramos, quien coordina el grupo legislativo al que pertenezco.

Al respecto, es importante precisar que en el Proceso Legislativo existen técnicas denominadas como Derecho Comparado, que permiten confrontar semejanzas y diferencias entre sistemas jurídicos vigentes en el mundo para la mejora de un marco jurídico específico.

Muchas de las Leyes y Normatividades actuales en el País, incluso aprobadas en el Congreso Local y originadas desde todas las fracciones, retoman este principio: Capítulos completos, Artículos relevantes, Transitorios de distintas leyes que están fundamentadas en ejercicios legislativos ya existentes. Lo criticado por la compañera Rosalva Farías y el compañero Carlos César no es una falta al Pueblo de Colima sino una técnica legislativa que ellos mismos utilizan.

En su crítica sesgada hacia mi propuesta de Ley, a la diputada Rosalva Farías le faltó decir que la propuesta de Ley de Educación que ella presentó se originó a partir de una plantilla denominada “Ley Marco” en materia de educación a la que solamente tuvo que llenarle los espacios en blanco con el nombre de Colima. Ese documento fue presentado en Jalisco y el Congreso de la Unión lo ha recomendado, “no obligado”, como un documento base para las adecuaciones locales en materia educativa.

En un ejercicio de pluralismo, democracia y contraste de ideas, me parece que lo que sí es una afrenta al Pueblo de Colima es presentar una supuesta reforma que nace desde los pasillos de la dirigencia magisterial local que representa la diputada Farías. Esa misma dirigencia que se ha quedado callada junto con ella ante la falta de medicamentos para el magisterio, esa misma dirigencia que es omisa ante las violaciones constantes a los derechos laborales de las y los trabajadores de la Educación, esa misma dirigencia que solapa las tropelías que el Gobierno del Estado comete con los recursos destinados al magisterio, que ha sido omisa en manifestarse sobre el entero de las prestaciones y aportaciones al IPECOL en detrimento de los profesores con plaza estatal.

Por su parte, el diputado Carlos César Farías, se deslinda de lo que él considera un error y de paso dice que el Grupo Parlamentario también presenta esa postura.

En lo personal, le agradezco el deslinde. A mí no me apena reconocer que en las iniciativas que he presentado recurrimos al derecho comparado y han dado frutos. Gracias a ello tenemos la “Ley Olimpia” y la “Ley Ingrid”, además de otras reformas legislativas que nacieron gracias a la inquietud legislativa de su servidora.

Le agradezco el deslinde justo ahora, porque está claro que somos diferentes. Mientras yo he manifestado una posición férrea en contra del endeudamiento propuesto por el Gobierno del Estado, al diputado Farías le ha faltado ser más firme en su posición. No ha dicho si sí, no ha dicho si no, pero es evidente que su indefinición pública ya ha generado inquietudes incluso entre la dirigencia estatal del PT, que encabeza el Senador Joel Padilla Peña.

Me sorprende que siendo abogado, al diputado Farías se le olvide que una de las técnicas principales en el proceso legislativo es el derecho comparado. Sinceramente, no lo veo redactando de inicio a fin una propuesta de Ley como la que ha criticado y no porque dude de su capacidad, sino, porque se la pasa en gestiones, en comunidades rurales y en oficinas municipales dialogando con funcionarios públicos que tienen posiciones contrarias a los principios de la Cuarta Transformación que representamos.

Este es un momento de definiciones. Así lo dijo el Presidente Andrés Manuel López Obrador: o se está con el pueblo o se está contra él.

Hay que construir una mejor propuesta en materia educativa que considere todas las vertientes de educación posibles; que sea incluyente con los grupos indígenas, con las personas con discapacidad, que valore y pondere la diferencia; que privilegie el derecho de los trabajadores de la educación y que pondere la excelencia educativa.

Atentamente.

Dip. Ana Karen Hernández Aceves