++El instructor comentó que desde hace más de dos décadas, en el mundo se usa el término “Sordo” con mayúscula, para denominar a las personas cuya primera lengua es de señas.
En días recientes, 40 estudiantes de diversas licenciaturas del campus Manzanillo de la Universidad de Colima comenzaron a tomaron el taller de Lenguaje de Señas, impartido por Carlos Francisco Sánchez, con la guía de Fabiola Soto Estrada, responsable del área de atención a la discapacidad en el Centro Universitario para el Bienestar Integral (CUBI).
El taller se realiza en instalaciones de la Facultad de Ingeniería Electromecánica (FIE) del campus El Naranjo. Janet Aurelia Alcalá Rodríguez, directora de este plantel, dijo que el propósito de esta actividad académica es que las y los estudiantes “adquieran conocimientos sobre este lenguaje para lograr comunicarse con personas con discapacidad auditiva y visual”.
Los contenidos del taller son: la contextualización de la cultura sorda y definiciones de sordo, mundo y sordomudo. También habrá momentos para compartir experiencias de personas con esta discapacidad.
El instructor comentó que desde hace más de dos décadas, en el mundo se usa el término “Sordo” con mayúscula, para denominar a las personas cuya primera lengua es de señas y que tienen con ellas peculiaridades culturales desde el punto de vista del uso de la lengua y señas.
Además, contó sobre los primeros maestros Sordos en México, como Eduard Huet, fundador de la educación pública para personas sordas en Brasil y México, en el año 1857 y 1857, respectivamente.
También expuso que existen cuatro lenguas de señas documentadas en México: Lengua de Señas Mexicana (LSM), reconocida en junio del 2005; Lengua de señas maya, en Yucatán (1980); Lengua de señas Chatino de San Juan Quiahije, en Oaxaca (2016) y la Lengua de señas Zinacanteca, en Chiapas (2019).
“Además de estas cuatro lenguas -dijo el instructor-, la Secretaría de Educación Pública reportó una variante más en la Sierra Gorda de Querétaro, en 2022. Igualmente, se tiene registro de que existen comunidades sordas e intérpretes que reportan otras variantes en Morelia”.
Durante el taller, las y los estudiantes comprenderán la importancia de dominar un lenguaje incluyente y los beneficios como sociedad para que más personas se involucren y se sumen a tener estos conocimientos. Ya realizaron una práctica donde conocieron el abecedario, los números, y cómo decir nombres y lugares.
Quienes se inscribieron, en su gran mayoría conviven con personas con alguna discapacidad visual o auditiva. Otros dijeron que en sus espacios de trabajo quisieran ayudar a las personas que lo necesiten.
El taller será impartido durante todo el semestre en la FIE, campus El Naranjo, en Manzanillo.