Esteban Cortés Rojas
=López Obrador acabó con el dolo y falsedad de Vladimir Parra y secuaces respecto al libramiento =Locho no tiene dudas
El Nuevo Libramiento Colima Vía Rápida que promueve el gobierno del Estado con un monto de inversión de 2 mil 692 pesos y que comenzará a construirse en enero del 2021, fue presentado en la “mañanera” de ayer por el presidente López Obrador. ¿Qué significa en el fondo este anuncio?
Contrario a lo que han señalado desde hace semanas los diputados de Morena en el Congreso del Estado, particularmente Vladimir Parra Barragán, la obra del libramiento no es ningún negocio para beneficiar a unos cuantos, no hay irregularidades detrás ni es verdad que no se tengan los permisos y licencias necesarias para su viabilidad como dolosa y falsamente lo ha pretendido presentar Parra. Y eso no lo dijo el gobernador Ignacio Peralta ni el secretario de Planeación y Finanzas ni el de Infraestructura y Desarrollo Urbano; fue dicho, nada más y nada menos, que por el presidente de la República y lo secundó el secretario de Hacienda y Crédito Público, Arturo Herrera Gutiérrez, que en esa conferencia matutina dijo que cuando estuvo en Colima conoció de primera mano el proyecto y está convencido de que es necesario para el desarrollo de la entidad: “Una parte importante de todo lo que se descarga en Manzanillo, en realidad se lleva al resto del país y pasa por esta carretera hacia Guadalajara; esto va a permitir hacerlo de una forma más eficiente”, dijo Herrera.
No por nada Vladimir Parra Barragán, depuesto presidente de la Comisión de Gobierno Interno y Acuerdos Parlamentarios del Congreso del Estado y actualmente coordinador de la micro bancada morenista, matizó su discurso incendiario en contra de la obra que promueve el gobierno del Estado. Ya no es el negocio de Peralta y amigos, ya no es cierto que no se tengan los permisos y licencias para realizarse; ahora es una buena idea del gobierno de la República para ayudar a la economía de Colima. Así, en una conferencia de prensa mañanera, a Vladimir Parra y sus aliados en el Congreso como Blanca Livier Osorio Rodríguez, Ana Karen Hernández, Araceli García Muro y Arturo García Arias, se les acabó el combustible con que intentaban quemar un proyecto viable para Colima, que ahora es avalado nada más y nada menos que por el presidente de México.
MESON.- A Leoncio Morán no le cabe ninguna duda de que será el próximo gobernador del Estado una vez traspuesta la aduana electoral de junio de 2021. Lo sostuvo en plática con el círculo de análisis político del Club Primera Plana que agrupa a los más picudos observadores en la materia. Entre varias razones que nos ofreció, destaca la de que él, con las siglas del partido Movimiento Ciudadano, ha hecho alianza con los más auténticos líderes de las fuerzas sociales que, aunque provienen de distinto origen partidista, se le han unido en el propósito de alcanzar la primera magistratura del estado. Muchos nombres mencionó Locho Morán que, como el caso de Federico Rangel, se le han sumado: Perla Vázquez, Enrique Michel, Jesús Dueñas, etcétera. Otras consideraciones por las que creé que ganará la gubernatura son, una, que al efecto del gobierno de Morena el país se está cayendo a pedazos, se incrementa la miseria y se aplican políticas de hace 70 años; otra, que la alianza PAN-PRI, PRD es la confirmación de la tesis (de Morena) de que si se están aliando es porque los identifica el pasado común de la corrupción. Ya como gobernador, dijo, no va a cuestionará a Morena ni al presidente López Obrador a pesar de su centralismo y su satanización del neoliberalismo; en cambio haría un gobierno municipalista, facilitador de la inversión privada, como el de Enrique Alfaro, en Jalisco. No le preocupa a Locho la actitud errática y desorientada de Felipe Cruz, el alcalde de la Villa de quien se decía que jalaría con para el lado de MC, pero ha dado bandazos y no se sabe para dónde tira. Felipe “nunca ha estado en el proyecto (de MC y Locho) porque él no ha querido; ha sido como las muchachas que les ruegas y les bailas bonito pero te mandan a la ch…”. Finalmente Locho hace una reflexión: “¿Quién tiene la mejor capacidad para gobernar? Creo que yo”… ¡Arrieros somos!
