La industria restaurantera en Colima estima que los efectos de la contingencia sanitaria por el Coronavirus  será de una grave crisis para el sector, ya que consideran que el 50 de los establecimientos  ya no abrirán sus puertas, “la expectativa es una detonación del comercio informal debido a la falta de apoyo por parte del gobierno federal a la economía del país”.

Lo anterior  dio a conocer el Presidente de la Delegación Colima de la Cámara Nacional de la Industria de Restaurantes y Alimentos Condimentados (CANIRAC), Felipe de Jesús Santana Linares, quien mencionó que “estamos calculando que el 50 por ciento de las empresas que hay en el estado ya no vuelvan a levantarse, al menos ya no como estaban antes de esta crisis, y creemos que el comercio informal se va a detonar como nunca lo habíamos conocido, puesto que muchos restauranteros se van a quedar sin local, se van a quedar sin personal, sin inmobiliario, ni con el equipo que utilizan para trabajar porque lo habrán  perdido, se lo habrá quitado el Seguro Social, el SAT, etcétera; y van a tener que vivir de alguna forma, ya sea trabajando como cocineros o meseros los mismos dueños de restaurantes o abriendo pequeños negocitos en la calle, como conocemos ya el comercio informal aquí en nuestra ciudad”.

Explicó que “podemos llegar a pensar que en el estado se pueden acabar alrededor de mil 500 empresas pequeñas  que se dedican a la gastronomía, las cuales no van a volver a existir, que no van a volver a salir y después habrá otras 2 mil 500 que van a tener que cambiar lo formatos que conocían, rentar menos locales, vender en la calle o afuera de su casa, ya que va a ser muy difícil esta reactivación económica ante el panorama que está registrando el mercado nacional y la economía en el mundo, por lo que creemos que el 50% de las unidades de negocio van a estar comprometidas y posiblemente no se levanten”.

CIERRAN MÁS DE 330 RESTAURANTES EN EL ESTADO

Santana Linares dijo que ante la contingencia sanitaria han cerrado en el estado más de 330 restaurantes, de los cuales 8 corresponden al municipio de Tecomán, más de 250 establecimientos en los municipios de Colima, Villa de Álvarez y Manzanillo.

“Estamos procurando cuidar lo más posible y lo poco que nos queda, pensando en cuántos de estos van a volver a abrir y cuantos no lo harán”, refirió.

Informó que el cierre de estos restaurantes ha provocado que casi 4 mil empleos directos estén suspendidos a nivel estatal como cocineros, meseros, garroteros, gente de limpieza, de mantenimiento; aparte los empleos indirectos que se generan, “por lo que estamos hablando que son 3 veces más los empleos que traemos pausados”.

 

El líder de los restauranteros mencionó que no se ve muy buen panorama, “cada vez nos alejamos más de la meta, antes eran 30 días de cuarentena, ahora estamos hablando de 15 a 22 días más, pero creo que va a ser la primera quincena de junio y todavía vamos a estar como que salimos o no salimos. Sí   ha sido duro para muchos aguantar un mes, aguantar 45 días más va a ser mortal para muchos empresarios”.