+Se aplica rociado intradomiciliario, control larvario y fumigación en zonas de riesgo

La Secretaría de Salud y Bienestar Social lleva a cabo en forma permanente acciones de control del dengue, zika y chikungunya, como el rociado intradomiciliario en casos probables de dengue, el control larvario y la fumigación, en las que promueve la participación o colaboración social.

En forma permanente realiza el rociado intradomiciliario de los casos probables de dengue y en cuatro casas a la redonda, en donde el mosco infectado pudiera estar sobrevolando y alimentándose, con lo cual se busca cortar la cadena de transmisión.

En este sentido, se indica que si la población tiene síntomas de la enfermedad, hay que acudir a consulta y no automedicarse, ya que así se puede realizar el rociado intradomiciliario para cortar la transmisión del dengue en la familia y en la comunidad vecinal.

Asimismo, realiza acciones de control larvario en las áreas en donde hay mayor densidad de huevecillos del mosco, con las que se orienta a la población sobre cómo evitar larvas en el domicilio con la estrategia de lava, tapa, voltea y tira y se aplica un larvicida en los recipientes donde se acumule agua.

Al respecto, se informa que es fundamental que la población atienda al personal de Vectores al acudir a su domicilio porque así recibe la orientación sobre lo que tiene qué hacer en su casa para evitar tener moscos y recibir larvicida para que no se generen criaderos del mosco.

Personal de La coordinación estatal de Vectores menciona que otra acción de control es la fumigación con máquina pesada, para lo cual se establecen tres ciclos ordinarios al año, dependiendo de los espacios en donde haya proliferación de moscos, sobre todo en período de lluvias, por lo que se fumiga en las áreas donde hay mayor riesgo de transmisión.

En dicha acción la población participa al abrir puertas y ventanas cuando se lleve a cabo la fumigación, para que el fumigante penetre en la vivienda y así derribar a los moscos que andan volando, así como quitar cosas que obstruyen el insecticida, cubrir alimentos, bebidas y aves canoras y alejar del área de fumigación a niños y ancianos.

Informa que hasta el jueves de la semana pasada, la Secretaría de Salud federal reporta para la entidad una incidencia de 8 casos por cada 100 mil habitantes, lo que la coloca en el primer lugar en este indicador, y en número de casos ubica a Colima en el tercero con 64 casos registrados (el año pasado eran 57).